Los rescatistas que asistieron a los canes lamentaron profundamente los nuevos casos de maltrato, tanto de apuñalamiento como de los explosivos.
El reporte de Salto del Guairá indica que el perro apuñalado fue asistido por un licenciado en enfermería, ya que no hallaron veterinario de inmediato.
El licenciado Javier Toledo, que también es bombero, procedió a sacar el cuchillo de la espalda del can y luego saturó la herida.
El animal fue entregado a la Asociación Mymba Ñemohesãi, para su cuidado temporal.
Evar Alderete, bombero rescatista, manifestó que ya cuentan con la identificación de la casa donde vive el agresor, aunque aún no tienen el nombre exacto para formular la denuncia ante la Policía Nacional.
El otro hecho ocurrió en Piquete Cué donde una perrita fue atacada y su mandíbula quedó destrozada porque le introdujeron un petardo en la boca.
Los profesionales veterinarios, piden más conciencia para que no vuelva a registrarse estos tipos de situaciones.
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