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Cuerpos serán sometidos a autopsia y se habla de pago de rescate

Autoridades intervinientes siguen trabajando en el esclarecimiento del caso de secuestro del colono menonita, quien fue posteriormente asesinado, junto con otras dos personas, pese a que al parecer hubo un pago de rescate de G. 2.000 millones.

Foto: Ministerio Público

El lunes, pasado el mediodía, llegó la información de un secuestro en Santaní. Un menonita de origen alemán,  Helmut Ediger Friesen, de 74 años, y al menos tres peones, fueron llevados por sus captores, quienes pedían un rescate de G. 2.000 millones.

Alrededor de las 19:30 se confirmaba que tanto Helmut Ediger Friesen como dos de sus peones fueron brutalmente asesinados, se trata de Rolando Díaz González, de 18 años, y Odair Dos Santos, de 36 años, este último sería el capataz de la estancia del colono.

Minutos antes de conocerse el trágico desenlace, uno de los peones pudo ponerse a salvo, se trata de Eder Cordeiro Machado, de 18 años. El joven habría escapado cuando vio que su patrón y compañeros estaban siendo ejecutados y durante este martes, tendrá que declarar para aportar mayores datos a la investigación.

Una vez que se realizó el levantamiento de los cuerpos, que fueron hallados en el propio establecimiento ganadero del ahora fallecido, la zona fue rodeada, teniendo en cuenta que se maneja la información del pago del rescate.

Desde el Ministerio Público señalan que dos de los fallecidos presentan heridas con arma de fuego y uno con arma blanca, según confirmó el comisario César Silguero.

Hasta el momento se habla de que fueron dos personas los responsables del secuestro y homicidio.

Se mencionó también, que probablemente los delincuentes se enteraron que Helmut Ediger Friesen habría vendido una importante cantidad de ganado durante el fin de semana, por ese motivo pidieron la mencionada suma de dinero, que según trascendió, el hijo de la víctima dejó en el lugar donde le indicaron y que quedaba a al menos 1.500 metros de donde fueron hallados los cuerpos.

El fiscal José Godoy y la agente fiscal de la Unidad Especializada de Antisecuestros, María Irene Álvarez, junto al comisario Cesar Silguero, intervienen en el caso, fueron hasta el sitio donde se hallaron los cuerpos, y recogieron datos que señalan que se utilizó un revólver calibre 38.

El dato que se maneja consiste en que efectivamente se pagó la suma de G. 2.000 millones. Por el momento, no hay confirmación oficial por parte de autoridades intervinientes.

En el transcurso de la mañana de este martes, se llevará a cabo la autopsia de los cuerpos que ya se encuentran en sede de la morgue judicial.

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