Eduardo Chavarro Ovalle, especialista del Centro de Respuesta a Incidentes de la firma de seguridad informática Kaspersky, conversó con RDN y explicó que se trata de una situación que se presenta en toda la región.
“Desafortunadamente, la reconstrucción a través de piezas, que no son, digamos el sistema completo, toda la tecnología que integra a un iPhone no es deshabilitada completamente, hay piezas que siguen funcionando y en algunas versiones de iPhone es posible hacer el cambio del IMEI, que es ese identificador único que para Latinoamérica se estableció que se iba a empezar a marcar como robado, de tal forma que no pudiera de alguna forma ser robado en Colombia e ir a ser vendido en otra región, tienen la posibilidad de cambiar ese valor, del IMEI, y entonces rápidamente ya salen de la base de datos de dispositivos marcados como robados y pueden comenzar a comercializarlos”, comenzó explicando a RDN.
Explicó la manera en la que los dispositivos remanufacturados son puestos en circulación y la estrategia que se utiliza para activarlos. “Cuando hacen la reinstalación requieren incluir algunos componentes adicionales que va a permitir que se activen todas las funcionalidades, pero eso significa que va a haber una aplicación no consentida por Apple, que puede generar mayor riesgo a los usuarios, es decir van a comprar un dispositivo, un smartphone, que ya viene con un malware puesto allí y que da muchas ventajas a cualquier otro tipo de malware, porque los controles de seguridad van a ser más laxos y va a permitir por ejemplo instalación de aplicaciones de entidades de terceros sin requerir la autorización de la tienda de Apple”, dejó en claro sobre el peligro de utilizar este tipo de equipos.
Semanas atrás, todo un esquema de venta de equipos iPhone remanufacturados fue desbaratado a nivel local. Según se supo, los teléfonos robados eran vendidos nuevamente, incluso en centros comerciales de importancia.







