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Maui en llamas: 93 muertos y miles de desaparecidos

Los muertos por los incendios devastadores en la isla hawaiana de Maui ya suman 93, y las autoridades advierten que lo peor podría estar por venir. La destrucción en el oeste de la isla es extensa, y aún se desconoce la cifra exacta de desaparecidos.

Foto: X/@Centinela_35

La isla de Maui, en Hawái, enfrenta una de las catástrofes más grandes en su historia con los recientes incendios forestales. El jefe del Departamento de Policía de Maui, John Pelletier, anunció el sábado que el número de muertos había alcanzado los 93 y que probablemente aumentará.

“Ninguno de nosotros sabe realmente su tamaño todavía”, admitió Pelletier, quien destacó la destrucción total en ciudades como Lahaina. El proceso de búsqueda y recuperación apenas ha comenzado, con solo el 3% del área afectada inspeccionada.

Cifras de desaparecidos

Se estima que hay cerca de 1.000 personas desaparecidas, una cifra que no ha sido actualizada desde el jueves. Los equipos de búsqueda, con ayuda de perros, luchan contra el calor y la humedad que ralentizan el trabajo.

La identificación de los cuerpos también avanza lentamente, con solo dos identificados hasta el momento. La situación en los incendios varía, con algunos extinguidos y otros aún ardiendo, desplazando a miles y dejando un saldo de 1.418 personas en refugios temporales.

El gobernador de Hawái, Josh Green, visitó las zonas afectadas y declaró que los muertos “van a seguir aumentando”. Los incendios de Maui ya han superado a los 85 fallecidos en los incendios de Camp Fire en California en 2018, convirtiéndose en los más letales del último siglo en Estados Unidos.

Daños e investigación

El balance de daños podría superar los 6.000 millones de dólares, y las autoridades también comienzan a examinar posibles fallos en la respuesta a la catástrofe. La fiscal general de Hawái, Anne López, anunció una “investigación exhaustiva” sobre las decisiones tomadas antes y durante los incendios.

Lo peor está por venir

Mientras la isla intenta recuperarse, la triste realidad es que lo peor podría estar por venir. La magnitud total de la tragedia aún se desconoce, y las palabras del gobernador Green resuenan con pesar: “Este es el desastre natural más grande que hemos experimentado” y “será un desastre natural del que tomará una cantidad increíble de tiempo recuperarse”.

 

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