Tras meses de estancamiento en el Congreso, la Cámara de Representantes de Estados Unidos finalmente aprobó un paquete de ayuda militar por un monto de USD 60.800 millones destinado a Ucrania. La votación, que tuvo lugar este sábado, contó con 311 votos a favor y 112 en contra, generando momentos de júbilo entre los legisladores presentes, quienes aplaudieron e incluso ondearon banderas ucranianas.
Se espera que el Senado ratifique el paquete en los próximos días y que el presidente Joe Biden lo firme para su promulgación una vez que le sea presentado. En un comunicado emitido por la Casa Blanca poco después de conocerse el resultado de la votación, Biden instó al Senado a enviar el paquete para su firma “rápidamente” y poder así enviar las “armas y equipos para que Ucrania pueda cubrir sus urgentes necesidades en el campo de batalla”.
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Según funcionarios de la Cámara, algunas de las municiones podrían llegar a Ucrania en el plazo de una semana. El presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, agradeció en un mensaje en la red social X “el vital proyecto de ley de ayuda estadounidense”, afirmando que este “impedirá que la guerra se expanda” y “salvará miles y miles de vidas”.
Por su parte, el portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov, advirtió que el paquete “arruinará aún más a Ucrania, causando la muerte de más ucranianos por culpa del régimen de Kyiv”.
Además de la ayuda a Ucrania, la votación del sábado también aprobó la concesión de fondos para Israel y Taiwán. Se destinaron USD 26.400 millones en ayuda militar y financiación para cooperación humanitaria a Israel, parte de los cuales se utilizarán para reponer los sistemas antiaéreos y aumentar la ayuda en Gaza, donde el ejército israelí lleva a cabo una ofensiva militar a gran escala contra la milicia palestina Hamás, provocando numerosas víctimas civiles y una grave crisis humanitaria.
Asimismo, se aprobó un paquete de USD 8.100 millones para la región del Indo-Pacífico, con el objetivo principal de fortalecer la capacidad de disuasión de Taiwán frente al peligro de una invasión china. Adicionalmente, se aprobaron nuevas reglas que contemplan la prohibición en Estados Unidos de la aplicación TikTok a menos que la compañía china propietaria venda su participación.
La aprobación del paquete de ayuda a Ucrania se vio demorada durante meses debido a la negativa de un grupo de legisladores republicanos liderados por la representante por Georgia Marjorie Taylor Greene, quienes se oponían a aprobar más ayudas al esfuerzo bélico en Ucrania si no se tomaban también medidas contra la inmigración clandestina en la frontera con México. Además, algunos demócratas plantearon su oposición debido a la inclusión de ayuda para Israel, manifestando su desacuerdo con la forma en que se está llevando a cabo la operación militar israelí en Gaza.
Tras arduas negociaciones, el presidente de la Cámara de Representantes, el republicano Mike Johnson, logró sacar adelante el paquete legislativo con el apoyo de muchos congresistas demócratas, a pesar del riesgo de provocar una reacción en su contra dentro de las propias filas republicanas. Taylor Greene acusó a Johnson de “traicionar” al pueblo estadounidense, y tres representantes republicanos han pedido su dimisión, especulándose con la posibilidad de una votación para apartarlo esta misma semana.
Tras meses de bloqueo republicano, EE.UU. aprueba $60mil millones para #Ucrania
La figura clave para entender por qué ahora sí es Mike Johnson, republicano, presidente de la Cámara de Representantes. El ala trumpista le ha declarado la guerra
Lo explicamos en @telediario_tve⬇️ pic.twitter.com/nnALr5RanP
— Ana Baquerizo (@AnaBaquerizo) April 21, 2024
La renuencia a aprobar rápidamente la asistencia a Kyiv refleja una tendencia más amplia de “fatiga de Ucrania”, a la que parecen estar muy atentos los cargos electos republicanos. Encuestas muestran que tanto en Estados Unidos como en Europa, el apoyo público a seguir ayudando a los ucranianos con dinero y armas ha disminuido, aunque sigue siendo superior al 50% en la mayoría de los países.
Han transcurrido seis meses desde que el presidente Biden buscó por primera vez la aprobación en el Congreso de un nuevo paquete de ayuda para Ucrania. Durante este período, ha llegado muy poca ayuda estadounidense a las líneas del frente, situación que ha sido aprovechada por las fuerzas del presidente ruso, Vladímir Putin, para hacer avances sobre el terreno.
En la sesión de votación, las afirmaciones ucranianas sobre la imprescindibilidad de la ayuda para mantener la defensa frente a Rusia fueron respaldadas por el general Christopher Cavoli, el oficial militar estadounidense de mayor rango en Europa, quien advirtió que Rusia reemplazó sus pérdidas más rápido de lo esperado y que Ucrania podría perder la guerra sin más apoyo militar de EE.UU.
Según destaca el corresponsal de Defensa de la BBC Jonathan Beale, Estados Unidos es el proveedor clave del equipamiento que Ucrania más necesita, como interceptores de defensa aérea, municiones de artillería y misiles de mayor alcance, como los HIMARS. De los casi USD 61.000 millones prometidos para Ucrania, poco más de un tercio se destinaría a reponer municiones estadounidenses, mientras que alrededor de USD 14.000 millones ayudarían a Ucrania a comprar nuevas armas.
A pesar de que se espera que la ayuda se envíe rápidamente, podrían pasar semanas antes de que las fuerzas ucranianas logren detener los recientes avances rusos en el campo de batalla. El mismo día en que se aprueba este paquete de ayuda se cumplen 2 años, 1 mes y 27 días desde que Rusia lanzó su invasión a gran escala de Ucrania.
En febrero pasado, las tropas ucranianas se vieron obligadas a retirarse de la ciudad oriental de Avdiivka, que había sido sitiada por las fuerzas rusas durante meses. La entrega de un territorio importante a Rusia marcó un duro golpe para la lucha de Ucrania en la guerra. El presidente ucraniano atribuyó la situación a la falta de suministros de armas occidentales y afirmó que la orden de retirada se tomó para salvar vidas de soldados.
Durante meses, mientras los políticos estadounidenses debatían sobre el apoyo a Ucrania, los soldados ucranianos han luchado por defender sus líneas frente al avance ruso pese a la escasez de proyectiles, cohetes y defensas aéreas.
Recientemente, Rusia ha intensificado sus ataques con drones y misiles contra la infraestructura energética de Ucrania. Funcionarios ucranianos han denunciado que pueden “contar con una mano” las centrales térmicas e hidroeléctricas de todo el país que aún no han resultado gravemente dañadas o totalmente destruidas.
Fuente: BBC
