El libanes, Karim Abou Saleh, propietario de una vivienda en el barrio General Díaz de Asunción, declaró ante el Ministerio Público que disparó por miedo al ver que un intruso sacaba un arma de su cintura. El hecho terminó con la muerte de Joel Alcides Garozzo Lezcano, quien ingresó a la propiedad durante la noche del domingo.
La agente fiscal Teresa Sosa informó que ya se hizo una reconstrucción del hecho, se tomaron fotografías del lugar y se constató que el fallecido tenía un arma de juguete, algo que el dueño de casa no podía prever al momento de reaccionar.
«El análisis es de legítima defensa» afirma fiscal sobre propietario que abatió a presunto delincuente
Según la Policía Nacional, el dueño de la casa manifestó que escuchó un ruido, salió con el arma de fuego en mano y al girar, se encontró con el delincuente que ingresó… pic.twitter.com/7aC2oPIVFG
— Monumental AM 1080 (@AM_1080) May 20, 2025
“La persona manifestó que se asustó”, indicó la fiscala, y agregó que el disparo fue efectuado de frente, lo que descarta que Garozzo haya estado huyendo al momento de recibir el tiro.
Según el relato preliminar de Saleh, él escuchó ruidos en el fondo de su casa, salió armado, vio a una persona extraña y, al ver que sacaba un arma de la cintura, disparó primero creyendo que su vida corría peligro. Los médicos forenses confirmaron que el proyectil ingresó por el frente, lo que coincide con la versión del propietario.
La fiscala Sosa explicó que los indicios apuntan a un caso de legítima defensa, aunque subrayó que se deberá seguir evaluando si existió proporcionalidad en la respuesta ante la supuesta amenaza. También aclaró que en ese tipo de situaciones, es razonable que una persona no pueda distinguir si el arma del agresor es real o no.
El dueño de casa prestó una declaración inicial el lunes tras el hecho, aunque no en audiencia formal, ya que no se encontraba en condiciones anímicas para ejercer plenamente su derecho a la defensa. Fue convocado a presentarse de nuevo este martes ante la Fiscalía.
Aparecen antecedentes del propietario
La causa tomó otro giro cuando trascendió que Karim Abou Saleh, de nacionalidad libanesa, posee antecedentes judiciales por supuesta apropiación ilegal de un inmueble de 7 hectáreas en Presidente Franco, presuntamente mediante falsificación de documentos. Se lo vincula con la jueza civil Sara Silva Figueredo, y se denunció un supuesto tráfico de influencias utilizando el nombre del abogado Jorge Bogarín, actual representante del gremio de abogados ante el Consejo de la Magistratura.
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Estos antecedentes generaron suspicacias en torno al tratamiento del caso actual, donde se teme que el propietario busque impunidad amparándose en el derecho a la legítima defensa.
El Ministerio Público continuará la investigación para esclarecer el hecho en su totalidad, mientras crecen las voces que piden una revisión imparcial del caso, teniendo en cuenta tanto el acto de defensa como los cuestionamientos sobre el historial del autor del disparo.
Fuentes: ABC Color- La Clave
