La Municipalidad de Asunción analiza la gestión de un nuevo crédito internacional de gran envergadura con el objetivo de reordenar su situación financiera y cancelar la totalidad de sus compromisos pendientes. Así lo adelantó el concejal Miguel Sosa, presidente de la Comisión de Hacienda de la Junta Municipal, al referirse a las proyecciones financieras de la Comuna.
El edil explicó que la propuesta se encuentra en etapa de trabajo y responde a una recomendación formulada por el economista Carlos Pereira, quien encabezó la intervención municipal entre junio y agosto de este año. El monto del eventual préstamo no fue precisado oficialmente, aunque se estima que rondaría los USD 300 millones, con un plazo de entre 10 y 12 años.
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Según Sosa, el crédito internacional permitiría refinanciar deudas acumuladas y reducir el costo financiero actual. Indicó que la tasa de interés sería sustancialmente menor a la de préstamos recientes. Señaló que mientras algunos créditos tomados en años anteriores alcanzaron tasas del 17,5 % anual, este nuevo financiamiento tendría un interés cercano al 1,5 % anual.
El concejal detalló que parte de los recursos se destinarían a retomar obras de infraestructura paralizadas. Entre ellas mencionó los trabajos de desagüe pluvial en la cuenca Lambaré y en la cuenca Bartolomé de las Casas. Estas obras debían financiarse con recursos de un préstamo anterior de G. 500.000 millones, que no fueron utilizados para ese fin durante la administración pasada.
Además, Sosa afirmó que el nuevo crédito permitiría completar proyectos ya adjudicados y otros que se encuentran en proceso administrativo. Remarcó que las obras de drenaje son prioritarias debido a los problemas recurrentes de inundación que afectan a varios barrios, dificultando la circulación y generando reclamos vecinales.
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En cuanto al préstamo aprobado recientemente por la Junta Municipal, por un monto de G. 184.000 millones, el concejal sostuvo que su finalidad fue cubrir compromisos inmediatos. Indicó que el pago se realizará con las recaudaciones previstas entre enero y febrero de 2026, período en el que históricamente se registran mayores ingresos.
Finalmente, Sosa afirmó que esta operación permitió evitar posibles demandas judiciales por atrasos en el pago de intereses a bancos y tenedores de bonos. Señaló que la proyección financiera de la Comuna apunta a una estabilización gradual en los próximos cinco a siete años, apoyada en un financiamiento internacional de largo plazo.
Fuente: ÚH
