Las autoridades penitenciarias frustraron un posible atentado contra Alexandre Rodríguez Gomes, hijo del extinto diputado colorado Eulalio “Lalo” Gomes, tras incautar dos armas de fuego en una celda de la cárcel Cereso de Cambyretá, Itapúa. Poco después del mediodía del lunes 9 de junio, agentes penitenciarios recibieron información de inteligencia sobre la presencia de un revólver calibre 38 y una pistola calibre 22, acompañados de 28 cartuchos, que habían sido introducidos clandestinamente a la penitenciaría regional. Según fuentes penitenciarias, estas armas supuestamente iban a ser utilizadas para ejecutar un atentado contra el presunto narcotraficante, quien se encuentra recluido en el sector conocido como Ranchería, considerado el área VIP de la cárcel regional.
El informante que proporcionó la información a las autoridades especificó que las dos armas de fuego se encontraban en la celda de Pascual Benítez Miranda, de 41 años, ubicada en el pabellón “A Alta” que alberga exclusivamente a criminales reclutados por la organización criminal brasileña Primer Comando Capital. Benítez Miranda está condenado a 26 años de prisión y es un conocido sicario originario de Caazapá, sindicado como responsable de múltiples homicidios en aquella región del país. Entre los crímenes más destacados atribuidos a este sicario se encuentra el asesinato de dos policías ocurrido en 2016, que conmocionó a la comunidad de seguridad nacional por la brutalidad de los hechos.
Pascual Benítez Miranda tiene un extenso historial criminal que incluye el asesinato a tiros del concejal departamental liberal Nelson Javier Vera Villar en 2015, crimen que generó gran conmoción en los círculos políticos locales. También se le atribuye la muerte del comerciante Carlos Jorge Delvalle Lugo, conocido como Carlos Gordo, quien fue acribillado el 14 de septiembre del año pasado en su comedor San Jorge. Este establecimiento comercial funciona sobre la Ruta 6, específicamente en el Cruce Kimex, ubicado en el límite territorial entre los departamentos de Itapúa y Alto Paraná.
Durante el operativo de requisa realizado por los guardiacárceles en la celda indicada por el informante, efectivamente fueron halladas las dos armas de fuego, los cartuchos correspondientes para cada una de ellas y un teléfono celular.
Durante el mismo procedimiento de requisa, los guardiacárceles también revisaron exhaustivamente la celda del recluso Ronal Javier Núñez, de 28 años, de donde incautaron un teléfono celular que podría contener evidencia relacionada con el complot. Núñez es un presunto sicario originario de Pedro Juan Caballero que se encuentra detenido por su presunta participación en el séxtuple asesinato registrado en enero de 2024 en la estancia de Ideal, ubicada en Cerro Corá. Esta propiedad pertenecía al ahora prófugo Marciano Denis Torales, de 54 años, quien se encuentra en la lista de los más buscados por las autoridades paraguayas.
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Según investigaciones preliminares, aquel ataque múltiple habría sido ordenado por el extinto narcotraficante Clemencio “Gringo” González. Las autoridades penitenciarias sospechan que tanto Benítez Miranda como Núñez están vinculados en la tenencia ilegal de las armas incautadas, situación que será confirmada mediante el peritaje forense de los teléfonos celulares confiscados durante el operativo.
Plan de atentado en sector VIP carcelario
Fuentes penitenciarias revelaron que existen sospechas fundadas de que las armas incautadas iban a ser utilizadas específicamente para ejecutar un atentado contra Alexandre Rodríguez Gomes, quien está recluido en el sector denominado Ranchería, que actualmente funciona como el área VIP de la cárcel regional de Itapúa. En esta zona se habilitaron recientemente habitaciones especiales destinadas para visitas conyugales o privadas, espacios que supuestamente los sicarios planeaban aprovechar para acercarse a su objetivo y ejecutar el atentado sin levantar sospechas inmediatas.
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El plan criminal aparentemente consistía en utilizar las facilidades del área de visitas privadas para que los sicarios pudieran acceder al sector donde se encuentra recluido el hijo del extinto diputado Lalo Gomes.
Como medida preventiva, se reforzó la seguridad en Ranchería, y se limitó el acceso a visitas íntimas mientras se evalúa la extensión del riesgo. El Ministerio de Justicia aún no emitió un comunicado oficial, pero agentes del sistema penitenciario confirmaron que se intensificaron los controles internos y se ordenó el monitoreo permanente de los pabellones de alta peligrosidad.
Fuente: ABC Color







