De acuerdo a lo que reporta la agencia española EFE, el exmandatario fue condenado hoy a nueve años y medio de cárcel por un tribunal de primera instancia, por su implicación en la red de corrupción que operó en Petrobras.
La sentencia fue dictada por el juez Sergio Moro, responsable de las investigaciones sobre la colosal trama corrupta destapada en el seno de la petrolera estatal y conocida como Lava Jato, el mayor escándalo de corrupción política en la historia del Brasil. El magistrado encontró a Lula culpable de los delitos de corrupción pasiva y lavado de dinero.
La BBC británica señala que «en concreto, Lula fue hallado culpable de aceptar US$1,1 millones en coimas de la firma constructora OAS, un monto que fue invertido en la reforma y amueblado con piezas de lujo de un apartamento triplex en la localidad costera de Guarujá, en el estado de Sao Paulo».
Es la primera vez en la historia que un expresidente del vecino país es condenado por un caso de corrupción. Da Silva había afirmado varias veces que se trataba de una cacería de brujas política.
Lula puede aún apelar la sentencia y no irá a prisión hasta que termine ese proceso.
