El Papa pidió perdón por “el mal ejemplo” que dio durante las Vísperas de la Solemnidad de Santa María Madre de Dios, en el Vaticano, cuando reaccionó de forma airada ante una peregrina que tomó por sorpresa su mano y lo arrastró hacia ella.
El Santo Padre, que se había acercado a rezar ante el Pesebre situado en el centro de la Plaza de San Pedro, dio dos manotazos para liberarse de la peregrina, que lo había tomado y estirado de manera sorpresiva.
Durante el rezo del Ángelus en el Palacio Apostólico este miércoles, el Pontífice rechazó su reacción y pidió perdón: “Muchas veces perdemos la paciencia. También yo. Pido perdón por el mal ejemplo de ayer”.
El Santo Padre se expresó así después de recordar que la salvación se sustenta en la paciencia del amor: “El amor te hace paciente”, aseguró, de acuerdo a lo informado por ACI Prensa.
El incidente, muy comentado en redes sociales, ocurrió muy rápido, sin que los responsables de la seguridad del Sumo Pontífice tuvieran tiempo de reaccionar para evitarlo.
