Se trata de la primera planta avanzada de biocombustibles en el hemisferio sur, que será construida en el país (Villeta) por la empresa ECB Paraguay, dirigido por el empresario brasileño Erasmo Carlos Battistella.
De acuerdo a lo informado por Última Hora, la Zona Franca garantiza el mantenimiento de las condiciones legales del proyecto por un período de 30 años, reforzando la seguridad legal para la inversión en el país.
El medio señala que la determinación del Gobierno seguirá contribuyendo a la competitividad económica del proyecto y reducirá el costo de su construcción.
El decreto presidencial destaca que la concesión de la Zona Franca se justifica por las siguientes razones: “Impulsar el comercio exterior” en el país, ya que toda su producción se exportará; agregar valor a las materias primas producidas en Paraguay, como grasas animales, aceites vegetales y aceites residuales.
Otros de los argumentos es que será una fuente importante de creación de empleo y traerá “tecnología de punta” a Paraguay y en cuarto lugar porque el complejo fue considerado “de interés nacional” debido a su importancia y alcance social y económico para Paraguay.
Es la mayor inversión privada en un solo proyecto en la historia del país, prevé la apuesta de USD 800 millones y la generación de miles de puestos laborales.
Avance del proyecto
El 8 de enero, reafirmando el apoyo del gobierno paraguayo al proyecto, Abdo Benítez firmó un decreto que autoriza al Grupo ECB a comprar tierras en el distrito de Villeta para la instalación de la planta de biocombustibles. La medida fue necesaria porque la tierra está en una zona de seguridad, a orillas del río Paraguay, en la región fronteriza con Argentina.
El proyecto incluso recibió un decreto favorable para su instalación por parte del Ministerio de Defensa, apunta la edición impresa.
