La muerte de un niño, de 10 años, el cual se mostraba siempre alegre y era muy trabajador, sigue conmocionando a toda la localidad de Valle Apuá, distrito de Quiindy, donde sus compañeros y docentes se manifestaron exigiendo que se esclarezca el caso.
El pequeño había dicho que iría a ver televisión con un compañero, sin embargo horas después, fue encontrado sin vida detrás de la casa de sus abuelos, con quienes vivía en compañía también de su padre.
La fiscal Teresita Paredes, en contacto con Noticias Paraguay, manifestó que el cuerpo del menor no presentaba ningún rastro de violencia. Los resultados de la autopsia estarán en aproximadamente 30 días.
Mencionó también que recibió un video en el que una mujer manifestaba que el chico sufría de constantes maltratos, por parte de sus abuelos que tienen 65 y 66 años. “La señora decía que el niño era maltratado y que vivía un infierno, nos preocupa que como si se sabía con anterioridad de ese hecho, no se haya denunciado antes ante la Codeni”, expresó la fiscala.
