La distribución de pupitres escolares importados de China avanza a ritmo lento según lo confirmado por el ministro de Educación, Luis Ramírez, quien informó que tras un mes de iniciado el proceso de entrega, solo han logrado distribuir 50.000 unidades.
Esta cifra representa apenas el 15% del total de 330.000 juegos de mesas y sillas adquiridos a través de Itaipú Binacional para instituciones educativas de 22 distritos priorizados según niveles de pobreza, mediante una inversión total de USD 32 millones.
La adquisición fue realizada a la empresa Kamamya S.A., propiedad del empresario Long Jiang, quien mantiene estrechos vínculos con el vicepresidente Pedro Alliana, habiendo facilitado tres de sus aeronaves para la campaña política del actual funcionario. Adicionalmente, el empresario sostiene relaciones cercanas con el clan Zacarías Irún de Ciudad del Este, familia a la que pertenece Justo Zacarías Irún, actual director general de la hidroeléctrica, entidad que financió la millonaria compra de mobiliario escolar.
Según proyecciones oficiales proporcionadas por el titular del MEC, esperan alcanzar la distribución de 100.000 pupitres en aproximadamente 15 días, y completar una segunda tanda de 103.000 unidades antes de julio. Esto significaría que para mediados de año habrían entregado 203.000 juegos de mesas y sillas, quedando pendientes aún 127.000 muebles por distribuir en centros escolares de todo el país. El ministro Ramírez enfatizó que la meta es renovar completamente el mobiliario escolar para finales de 2025, incluyendo no solo pupitres sino también escritorios para docentes, bibliotecas y otros equipamientos para aulas.
El operativo de distribución comenzó en Luque hace dos semanas y recientemente se extendió a Capiatá, según informó Itaipú Binacional, aunque sin precisar la cantidad exacta de muebles destinados a este distrito, uno de los seis priorizados en el departamento Central. Un aspecto controvertido del proceso es que la distribución se realiza con camiones identificados con el logo de la hidroeléctrica, pese a que el Pliego de Bases y Condiciones (PBC) establece claramente que todos los costos de almacenaje y logística de entrega deben correr por cuenta exclusiva del proveedor, Kamamya S.A.
Los plazos establecidos en el PBC indican que la empresa debe entregar como mínimo el 40% del total (132.000 pupitres) en hasta 150 días desde la firma del contrato, seguido por dos entregas adicionales del 30% cada una en plazos de 180 y 240 días respectivamente. Sin embargo, José Luis Rodríguez Tornaco, superintendente de Comunicación Social de Itaipú, había anunciado que la intención era suministrar el 50% de los pupitres (150.000) en apenas 45 días, meta que parece inalcanzable considerando que solo han entregado 50.000 unidades cuando faltan apenas diez días para vencer ese plazo autoimpuesto.
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La licitación ha sido objeto de numerosos cuestionamientos, no solo por la lenta distribución sino también por otros aparentes incumplimientos contractuales. Los muebles están siendo ensamblados en tinglados municipales de Alto Paraná, San Pedro y Caaguazú, cuando el PBC exigía que la empresa adjudicataria dispusiera de un inmueble con superficie techada mínima de 7.000 metros cuadrados para estas tareas.
Adicionalmente, empresarios locales han criticado que la licitación excluyó los muebles de madera y estableció requisitos imposibles de cumplir para las industrias plásticas nacionales, mientras que a Kamamya S.A. se le permitió participar sin experiencia comprobada en el rubro, presentando simplemente tres facturas con la misma fecha del 29 de noviembre de 2024, por ventas a empresas del sector agropecuario.
Fuente: ABC Color
