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Empresas generan 237 empleos en cárceles

Diez empresas se instalan en cárceles, generando empleo para 237 reclusos. Trabajo y capacitación impulsan su reintegración social.

Las empresas instaladas en las penitenciarías dan empleo a unas 237 personas privadas de libertad. Hoy

El Ministerio de Justicia cerró el año con un importante avance en la reinserción social de las personas privadas de libertad (PPL). Diez empresas iniciaron operaciones en distintos centros penitenciarios del país, ofreciendo empleo remunerado a 237 reclusos. Esta iniciativa busca proporcionar herramientas para la rehabilitación y reintegración social a través de la capacitación laboral.

El ministro de Justicia, Rodrigo Nicora, destacó la relevancia de esta colaboración entre el sector público y privado, que no solo fomenta la inclusión laboral, sino que también permite la producción de artículos bajo el régimen de maquila, con potencial para exportación.

Entre las empresas que operan en los centros penitenciarios destacan Mega Plásticos, dedicada a la fabricación de batas hospitalarias, que emplea a 51 reclusos entre las penitenciarías de Juana M. de Lara y Minga Guazú. Por su parte, Dreamy International confecciona ajuares para bebés y genera empleo para 34 reclusos en Ciudad del Este y Minga Guazú.

En el ámbito textil, River’s S.A. y Ñamopua Paraguay fabrican remeras y jeans, respectivamente, brindando trabajo a 62 personas privadas de libertad en Minga Guazú y la Unidad Penitenciaria Industrial Esperanza (UPIE). Otras empresas como Doble A y Creation of Orzel Paraguay impulsan la producción de uniformes empresariales y serigrafía, respectivamente.

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Estas iniciativas buscan transformar el tiempo de reclusión en una oportunidad para adquirir habilidades laborales, esenciales para la reintegración social. Las empresas también contribuyen a la mejora de las condiciones económicas de los reclusos y sus familias, generando un impacto positivo tanto dentro como fuera de los centros penitenciarios.

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La producción bajo el régimen de maquila representa una oportunidad económica estratégica.

El Ministerio de Justicia busca ampliar esta iniciativa a más centros penitenciarios en los próximos años. Estas acciones son un paso significativo hacia la humanización del sistema penitenciario y la promoción de un modelo de justicia inclusivo y rehabilitador.

Fuente: Hoy