Política

Bachi Núñez defiende aumentos a sobrina y corta conferencia

Ante la presión periodística, el titular del Congreso negó parentesco con Berenice Sosa pese a ser su tío y defendió los aumentos otorgados.

El senador cartista Basilio Núñez junto a su cuñada Karina Cabrera. A la derecha, Berenice Sosa Cabrera, presunta “nepobaby” y “Bachi-ller” del Congreso.

Basilio «Bachi» Núñez, presidente de la Cámara de Senadores, intentó justificar los aumentos salariales otorgados a su sobrina Berenice Sosa Cabrera, una joven de 19 años que actualmente percibe G. 9.500.000 como funcionaria del Congreso Nacional. Durante una tensa conferencia de prensa, el senador colorado negó que se trate de nepotismo y terminó abruptamente el encuentro ante la insistencia de los periodistas.

El senador argumentó que no existe nepotismo porque, según su interpretación, Berenice fue nombrada en octubre de 2023, antes de que él asumiera la presidencia del Congreso. Sin embargo, los registros muestran que la joven ingresó con un salario inicial de G. 4.500.000, recibió un primer aumento a G. 7.100.000 en septiembre de 2024 y otro en enero de este año, elevando su remuneración hasta los G. 9.500.000 actuales, coincidiendo con la gestión de su tío.

Núñez recurrió a una curiosa interpretación legal y familiar para desvincularse del caso: «Te pregunto: ¿Cómo es el apellido de la persona? Es Sosa, mi apellido es Núñez, entonces, ni hasta cuarto, quinto grado de consanguinidad, no es familiar». Esta afirmación contradice abiertamente los principios básicos de la ley de nepotismo, que contempla vínculos familiares independientemente de los apellidos.

Cuando los periodistas consultaron sobre los méritos de la joven bachiller, el presidente del Congreso se negó a hablar de capacidades y sólo mencionó que «está en segundo año de arquitectura» y trabaja en «mantenimiento». Esta versión contradice la declaración jurada presentada por la propia Berenice en septiembre pasado, donde consta que cumplía funciones en la oficina del senador Basilio.

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El caso presenta otras inconsistencias reveladoras. Mientras Núñez aseguró que el último aumento «fue aprobado en la plenaria», también afirmó que «las reasignaciones salariales son potestad del presidente del Congreso», admitiendo implícitamente su responsabilidad en la decisión de aumentar el salario de su sobrina.

Visiblemente molesto por el escrutinio periodístico, «Bachi» Núñez optó por dar por finalizada la conferencia cuando se le cuestionó la legitimidad de que una joven sin experiencia ni formación profesional perciba un salario equivalente al de un profesional con años de trayectoria. «No hice nada ilegal, está en el Presupuesto de Gastos de la Nación, vamos a terminar entonces la conferencia», sentenció antes de retirarse.

Fuente: ABC Color