El Fiscal General del Estado, Emiliano Rolón, emitió la Resolución FGE N° 1604 mediante la cual apartó a la fiscala Nathalia Silva como enlace institucional con el Grupo de Acción Financiera de Latinoamérica (Gafilat). En su lugar, designó al agente fiscal Francisco Cabrera, perteneciente a la Unidad Especializada en Delitos Económicos y Anticorrupción (UDEA), quien asumirá inmediatamente todas las responsabilidades inherentes al cargo.
La medida adoptada por la máxima autoridad del Ministerio Público pone fin a la breve gestión de Silva, quien había sido designada apenas el 18 de marzo del presente año como punto de enlace entre la institución fiscal y la Red de Recuperación de Activos del Gafilat. Durante este período, también ejercía la titularidad del “Plan de acciones recomendadas claves, requeridas por el Gafilat como resultado de la evaluación mutua del país”, según señala el documento oficial emitido por la Fiscalía General.
Reemplazan a la fiscal Nathalia Silva como enlace ante Gafilat
En su lugar, asumirá el agente Francisco Cabrera, quien ejercerá como nexo del Ministerio Público en el Grupo de Acción Financiera de Latinoamérica (Gafilat).#Ñanduti l #LaGranCabina pic.twitter.com/gotr62nSHL
— Radio Ñandutí (@nanduti) April 28, 2025
Fuentes cercanas al caso revelaron que la destitución estaría directamente relacionada con denuncias recibidas por el Fiscal General sobre la presunta intervención irregular de Silva en una causa penal vinculada a un familiar suyo, imputado por un hecho punible tipificado como crimen. Esta situación generó serias dudas sobre su imparcialidad y objetividad en el ejercicio de sus funciones, comprometiendo potencialmente la credibilidad institucional ante organismos internacionales.
El caso que motivó la remoción de la fiscala se encuentra actualmente bajo estricto escrutinio judicial luego de que el ministro de la Corte Suprema de Justicia, Eugenio Jiménez Rolón, ordenara una auditoría de gestión al expediente en cuestión. Esta medida extraordinaria se produjo tras el cuestionamiento formal presentado por una de las partes procesales contra la controversial decisión de una jueza de Lambaré de otorgar medidas sustitutivas de prisión al familiar de Silva.
El elemento más polémico y determinante en este conflicto ético-profesional surge del hecho comprobado de que la propia fiscala Nathalia Silva se presentó como fiadora en la audiencia donde se definió la situación procesal de su familiar, evidenciando un claro conflicto de interés. Esta conducta transgrede directamente los protocolos éticos y normativos que rigen el comportamiento de los agentes fiscales, quienes deben mantener absoluta independencia y objetividad en todos los procesos penales.
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La designación del fiscal Francisco Cabrera representa un intento de la Fiscalía General por reencauzar las relaciones con Gafilat, organismo fundamental en la estructuración de políticas contra el lavado de activos y financiamiento del terrorismo en la región. Cabrera, con reconocida trayectoria en la investigación de delitos económicos complejos, deberá asumir inmediatamente la representación paraguaya ante este organismo internacional y retomar las acciones pendientes del plan de cumplimiento impulsado por dicha entidad.
Este escándalo dentro del Ministerio Público genera un serio precedente sobre las consecuencias institucionales que pueden tener las actuaciones indebidas de sus agentes fiscales, especialmente cuando estas comprometen la integridad de los procesos judiciales y la imagen del país ante organismos internacionales. La situación permanecerá bajo observación mientras avanza la auditoría ordenada por la Corte Suprema, cuyos resultados podrían derivar en sanciones adicionales para la fiscala removida.
Fuente: ABC Color
