El neumólogo Carlos Morínigo, del Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias y del Ambiente (Ineram), advirtió sobre la necesidad de que los médicos pediatras presten mayor atención a los relatos de las madres durante las consultas. Su llamado se produjo tras un caso ocurrido en el departamento de San Pedro, donde una niña de tres años aspiró la boquilla de un silbato y fue inicialmente diagnosticada con una simple alergia.
Según el especialista, la menor se encontraba en un cumpleaños cuando, al soplar una trompetita, la boquilla se desprendió y quedó alojada en los bronquios. La madre, al notar dificultad respiratoria, intentó auxiliarla y luego la llevó a un centro médico privado, donde los profesionales minimizaron el cuadro y la enviaron de regreso a casa.
▶️ TRAGÓ UN SILBATO EN UN CUMPLEAÑOS |
⚠️Una niña de 3 años de Santa Rosa del Aguaray vivió un gran susto luego de tragar accidentalmente el pequeño silbato de una cornetita.
Inicialmente le diagnosticaron una alergia y fue enviada a casa; sin embargo, al notar que la niña… pic.twitter.com/gLLNwvYgaF
— DELPY (@delpynews) October 16, 2025
La situación se agravó cuando la niña comenzó a emitir sonidos extraños al reír o correr. Ante esto, la madre decidió trasladarla al Hospital General, desde donde fue derivada al Ineram, en Asunción. Allí los médicos lograron identificar el cuerpo extraño y proceder a su extracción mediante un broncoscopio rígido, bajo anestesia general y respiración asistida.
Morínigo explicó que el silbato era un objeto radioopaco, lo que impidió su detección mediante una radiografía convencional. Por ello, insistió en la importancia de un examen clínico minucioso, un interrogatorio detallado y una escucha activa hacia los familiares, especialmente cuando se trata de niños menores de siete años.
Unite a nuestro canal de Whatsapp
El especialista advirtió que la aspiración de objetos pequeños puede provocar una obstrucción total de las vías respiratorias o infecciones severas, como neumonía. En este caso, la intervención oportuna evitó complicaciones mayores.
Finalmente, Morínigo subrayó que los profesionales de la salud deben reforzar los protocolos de evaluación infantil y atender con mayor sensibilidad las inquietudes de los padres. El caso de la niña de Santa Rosa del Aguaray sirve, según el médico, como ejemplo para prevenir errores diagnósticos en urgencias respiratorias pediátricas.
Fuente: Última Hora







