Una nueva polémica sacude al Tribunal Superior de Justicia Electoral (TSJE) en la antesala de la apertura de ofertas por la adquisición de 28.000 máquinas de votación, cuyo valor asciende a USD 93 millones. Según denuncias de sectores de la oposición colorada, el proceso estaría orientado a beneficiar a empresas cercanas al presidente de la República, Santiago Peña, y al asesor presidencial José Alberto Alderete.
La apertura de sobres está prevista para este jueves 22 de mayo a las 9:00, bajo la presidencia de Jaime Bestard (ANR, Honor Colorado). La licitación ha sido cuestionada por presunto direccionamiento a favor de las firmas ITTI y Technoma, ambas vinculadas a Peña, quien fue socio de ITTI a través de ueno Holding SAECA hasta marzo de este año.
TSJE suspende nuevamente licitación de máquinas de votación por sospechas de direccionamiento
En paralelo, también se denuncia que la firma Tecmont, propiedad de Enrique Duarte, presidente de la UIP, estaría recibiendo apoyo político de Alderete, vicepresidente de la ANR y figura clave del entorno presidencial.
Las alarmas también se encendieron en torno a la empresa de software Excelsis, dirigida por Daniel Sauca. Según los reclamos, ITTI y ueno podrían asociarse con esta firma para adjudicarse la licitación, replicando el modelo del consorcio MSA-Excelsis, que ya ganó contratos en 2021 y 2023 para alquiler de máquinas y provisión de software.
Tanto Federico Vázquez Villasanti (CEO de ueno), César Astigarraga (director de ITTI), como Sauca (Excelsis), habrían compartido vínculos comerciales en el pasado. Esto genera sospechas de que la competencia sea más aparente que real, y que en los hechos las principales oferentes estén alineadas al cartismo.
Cabe recordar que la Dirección Nacional de Contrataciones Públicas (DNCP), encabezada por Agustín Encina, ya emitió más de 30 observaciones al pliego por presuntas señales de direccionamiento. Incluso suspendió el proceso en tres ocasiones.
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Entre las empresas extranjeras interesadas se encuentran MSA (Argentina), Smartmatic (anteriormente rechazada por el TSJE en 2019) y Miru System (Corea), que no calificó en el proceso anterior.
La adquisición será financiada en un esquema de pagos a cuatro años y se proyecta que las máquinas estén en uso durante al menos una década. A medida que se acerque la fecha de adjudicación, el foco se mantendrá sobre la transparencia del proceso y la independencia institucional del TSJE.
Fuente: ABC Color
