El interventor de la Municipalidad de Asunción, Carlos Pereira, advirtió que la institución atraviesa una grave crisis financiera, marcada por un “sobreendeudamiento desmedido” heredado de la administración del intendente temporalmente separado, Óscar “Nenecho” Rodríguez. La situación, según dijo, genera amenazas diarias de proveedores que podrían suspender servicios básicos como el retiro de basura y el suministro de combustible.
En diálogo con la radio ABC Cardinal este viernes, Pereira explicó que su gestión se realiza bajo “recursos limitadísimos” y con una deuda que pone en riesgo el funcionamiento del municipio. La intervención, que inició el pasado 24 de junio, fue motivada por denuncias de la Contraloría General que detectó irregularidades en el uso de fondos provenientes de bonos públicos destinados a obras de infraestructura.
Según Pereira, esos recursos —unos 500.000 millones de guaraníes— habrían sido utilizados de forma irregular para gastos corrientes como sueldos, mantenimiento y servicios administrativos. “No hay generación de ingresos suficientes ni análisis de impacto para asumir nuevas deudas. El municipio está infracapitalizado”, afirmó.
Interventor promete revelar el destino de G. 500.000 millones en bonos desviados por Nenecho
La intervención también reveló incumplimientos con la Caja de Jubilados del Personal Municipal y maquinaria en mal estado que dificulta los servicios. A pesar del panorama, Pereira insistió en que las tareas no están paralizadas y que se intenta cumplir con los compromisos básicos mediante una “dosificación” de pagos a los proveedores.
En respuesta a declaraciones del intendente Rodríguez, quien sostuvo que la intervención generó “parálisis” en la Municipalidad, Pereira aclaró que las actividades continúan y que se mantiene la limpieza urbana y otras funciones esenciales.
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Además del trabajo administrativo, el interventor presentó una denuncia ante el Ministerio Público por una supuesta falsificación de planos en una dirección clave del municipio. Aunque no dio detalles, señaló que la irregularidad ocurrió en una de las oficinas con mayor capacidad recaudatoria.
Pereira aseguró que el equipo interventor trabaja con confidencialidad y que muchas denuncias recibidas carecen de documentos respaldatorios, lo que dificulta su validación. No obstante, sostuvo que casi todos los puntos analizados hasta el momento coinciden con los hallazgos de la Contraloría.
Fuente: ABC Color
