Las jóvenes quisieron probar su suerte y viajaron al Brasil para trabajar en un cabaret.
Las mismas quisieron desistir, pero no lograron hacerlo ya que fueron vendidas por el amigo de una amiga a una proxeneta.
De las tres mujeres una de ellas es menor de edad, fueron vendidas a la dueña de un burdel en la localidad de Santa Elena a G. 700.000, cada una, en su equivalente en reales.
El hecho sucedió en diciembre del 2017. La localidad de Santa Elena se encuentra ubicada a unos 100 kilómetros de Presidente Franco.
La unidad especializada Antitrata de Personas de la Fiscalía identificó al reclutador como Leonardo Sanabria, mientras que la propietaria sería una mujer llamada Andrea.
Sanabria cuenta con orden de captura desde hace más de un mes. La propietaria del prostíbulo también sería imputada, según la fiscal Analía Rodríguez, de la unidad especializada.
Las jóvenes fueron contactadas por una amiga de Leonardo, quien les propuso trabajar en un cabaret, a lo que accedieron voluntariamente, al llegar al sitio se percataron que fueron vendidas a la propietaria del prostíbulo.
Las víctimas asumieron que accedieron por curiosidad, y que al llegar al lugar se arrepintieron e intentaron volver a Paraguay, y no pudieron, ya que fueron amenazadas por la propietaria.
La fiscal Analía Rodríguez informó que las jóvenes contactaron por las redes sociales con una amiga y esta fue quien dio aviso a los familiares.
La denuncia fue hecha ante la Secretaría de la Mujer en Ciudad del Este, de donde el caso fue derivado al Ministerio Público y a través del Consulado Paraguayo en Foz de Yguazú, se denunció el hecho ante la Policía Civil del Brasil.
Las tres mujeres fueron rescatadas un día después, las mismas no denunciaron a la propietaria del prostíbulo en el vecino país.
Las mismas dijeron a sus familiares que viajarían a Encarnación con un amigo, pero se dirigieron al Brasil.
La Fiscalía abrió una investigación por trata de personas y se dispuso la captura del reclutador, reportó Última Hora.
