El profesional mencionó que los próximos gobernantes deben enfocarse a solucionar los problemas de la salud pública y remarcó que lo importante sería que el ente se enfoque a lo que realmente le corresponde, que es la salud de los habitantes.
Giménez explicó que hay tres aspectos urgentes para incluir en la agenda política de salud para el próximo quinquenio, pero mirando al largo plazo, los cuales serían; lograr la cobertura universal de la salud, reorientar la respuesta para prevenir y atender las enfermedades no trasmisibles y proteger a los hogares contra gastos catastróficos o empobrecedores ante una enfermedad.
El médico brindó detalles de los puntos más importante a tener en cuenta y sugirió cuál sería el camino a seguir.
“La primera es la cobertura universal de salud, y creo que es posible hacerlo. Cubriendo al 100% de la población paraguaya con atención primaria de salud, a través de las unidades de salud de atención a la familia, donde un médico, dos enfermeras y agentes comunitarios son responsables de atender a 3500 personas aproximadamente”, indicó.
La segunda sería la atención de las enfermedades no trasmisibles.
En relación al tema sostuvo que es necesario reorientar el sistema para poder dar una respuesta integral. Cada momento en la vida, para hombres y mujeres, tiene particularidades que señalan necesidades distintas. Todo esto ocurre en función a los determinantes sociales de la salud.
“El control del tabaco, del consumo del alcohol en exceso, de ciertos alimentos y de la contaminación es fundamental para prevenir estas enfermedades. Pero además se necesita desarrollar los servicios de atención integral y de calidad”, señaló.
En tanto que el tercer punto importante es proteger a los hogares contra gastos catastróficos
El médico expresó que pagar por un servicio complejo, puede derivar en dos situaciones: la exclusión o el no acceso; o bien, que la persona y su familia se vean en la necesidad de hacer un gasto excesivo.
«A veces mediante préstamos y otras a través de la pérdida de ahorros y patrimonio. Un tratamiento del cáncer puede costar entre 100 a 700 millones de guaraníes. Es urgente hacer funcionar el Fondo Nacional de Salud», puntualizó.
Refirió además que actualmente están vigentes las Leyes del FONARESS y la del PRONAD, para dar respuesta a ciertos eventos que frecuentemente conlleva a gastos catastróficos, sin embargo, estos no han sido implementados desde el 2013 a esta parte.
Finalmente expresó su preocupación por la manera en que se maneja el Ministerio de Salud y lamentó que se ha priorizado la política partidaria antes que la política sanitaria.
“Es irresponsable y peligroso partidizar la salud pública de nuestro país”, subrayó .
