En el panel denominado “Paraguay y la prevención de la tortura” realizado este martes en el museo de las memorias en conmemoración al Día Internacional en apoyo a las víctimas de la tortura, se señaló como principal problema el alto índice de pena anticipada en nuestro país.
La comisionada Soledad Villagra, presidenta del Mecanismo Nacional de Prevención de la Tortura (MNP), mencionó que la tortura no es la misma que se vivió en épocas de dictadura, sin embargo siguen vigentes otro tipo de tratos de degradan la dignidad humana.
Indicó que hay muchos obstáculos que impiden la erradicación de la tortura, como es la cultura del encierro, ya que se cree que privando de la libertad a las personas habrá más seguridad, sin embargo sucede lo contario.
“Somos el primer país en América Latina que encierra a la gente sin tener una condena”, puntualizó.
Según los datos estadísticos 14.542 personas se encuentran privadas de su libertad, y solo están condenadas 3.457. La sociedad está ganando gente marginalizada, ya que no existen programas adecuados de reinserción.
La tortura tiene otros rostros, entre ellos están aquellos que son maltratados en el momento de detención, la falta de protección de testigos, el abuso del aislamiento como sanción, y el hacinamiento en penitenciarias.
En la jornada participaron importantes referentes de los Derechos Humanos, entre los que se encontraba Carlos Portillo, excomisionado de la Comisión Verdad y Justicia, quien señaló que la tortura en se caracteriza por llevar a una condición de degradación de la persona. También puntualizó que la sociedad naturaliza la tortura, y justifica los hechos de violencia.
Algunas acciones del MNP, se basan en capacitar a las fuerzas públicas, fortalecer los sistemas de control, como también la identificación de grupos vulnerables como lo son los niños, adolescentes, personas mayores, población indígena, entre otros.
