El tribunal de sentencia estuvo integrado por Lourdes Morínigo, como presidente, Evangelina Villalba y Carlos Vera, ambos miembros. La agente fiscal del caso fue Juliana Giménez.
El procesado fue condenado por los hechos de violencia familiar y lesión grave, que mediante el concurso de hechos punibles la pena llegó a 14 años de cárcel, de acuerdo a lo informado por el diario Vanguardia, de Ciudad del Este.
Según lo informado por la 730 AM, la Fiscalía pidió 10 años de cárcel, mientras que la defensa solicitó cinco años de privación de libertad.
El medio impreso en su edición de este martes reseña una parte de lo acontecido durante el juicio oral. La fiscala Juliana Giménez se quebró en llanto cuando citó las heridas que el pequeño sufrió.
Giménez explicó que se confirmaron mordeduras humanas en el cuerpo del niño, quien quedó con secuelas físicas y psicológicas. Añadió que las lesiones pusieron en peligro la vida del niño lo que confirma la existencia del hecho punible de lesión grave.
Antecedentes
El caso se dio en diciembre de 2016, cuando un niño llegó hasta el Hospital Regional de Ciudad del Este con múltiples lesiones, entre ellas quemaduras hechas con cigarrillos, golpes y hasta sus uñas fueron arrancadas.
La madre del pequeño en ese momento tenía solo 17 años y convivía con el hombre, quien era el padrastro de su víctima.
Según informó la emisora, el libanés es hijo de un comerciante de Ciudad del Este y habría estado bajo los efectos de una sustancia al momento de los vejámenes al que sometió al niño.
Más detalles de los antecedentes en el video de abajo:
