El día del crimen, Mayra trabajó en su peluquería aproximadamente hasta las 13:30. Allí fue la última vez que la vieron con vida, tras lo cual se marchó con Aldo López y no se volvió a saber de ella hasta el reporte de su muerte.
Durante el velorio, la excuñada de Mayra conversó con la madre de la joven, quien relató cómo se enteró de lo acontecido. “Me contó que Aldo le llamó y le dijo: ‘Carolina, le maté a tu hija’ y le cortó”, confió.
Esta mujer, que conversó con el SNT, era muy cercana a la joven fallecida, incluso se encontraba al cuidado de la hija de Mayra, es decir su sobrina.
Además, denunció la sospechosa desaparición del automóvil de Mayra, un Toyota Vitz color plata del año 99.
Según se sabe, al momento de ingresar al sanatorio San Martín, la joven, tenía en su bolsillo la llave del rodado que hasta el momento sigue con paradero desconocido.
“Aldo hizo desaparecer, si no Aldo (sic) lo hicieron otras personas, pero con ayuda de él, tanto las pertenencias de Mayra como la de mi sobrinita están ahí, queremos, aunque sea una cadenita o un pequeño recuerdo para darle a su hija”, expresó la mujer.
Según informe del Sanatorio privado, la joven ya llegó sin signos de vida. Por su parte, la pericia forense indica que el cuerpo de Mayra presentaba lesiones en los ojos, pómulos, brazos y otras partes del cuerpo, además rastros de estrangulación en el cuello, replicó HOY.
