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Paraguaya denuncia que sus hijos son víctimas de red de pornografía infantil

Una paraguaya que vive en Alemania denunció que fue separada de sus hijos quienes en unos días más podrían pasar bajo la tutela de su exmarido, un hombre involucrado en una gran red de pornografía infantil. 

Pornografía infantil. Foto: Hoy.

Natalia Huber es una compatriota que hace varios años vive en Alemania, se casó y tuvo tres hijos. De acuerdo a su denuncia, el mayor de ellos fue violado por su padre biológico, al igual que ella, quien además sufrió de torturas por parte de su expareja. 

En contacto con Radio 1000 AM, explicó que, su pesadilla inició cuando denunció a su exmarido, quien supuestamente forma parte de una red de pedofilia que cuenta con mucho dinero e influencias.

Resaltó que la denuncia que hizo nunca prosperó. “Hace tres años que la Policía sabe lo que está pasando (…) y tiene conocimiento de quién está detrás de ese grupo”, expresó.

Comentó que presentó su teléfono como prueba de su denuncia, pero luego de un año, los agentes se comunicaron con ella para decirle que podía retirar su aparato celular, el cual “llamativamente se descompuso en poder de ellos”, haciendo que todas las pruebas de las denuncias que realizó se perdieran en su móvil.

La mujer manifestó que está llevando la lucha sola y que buscó ayuda en muchos lugares, pero no recibió respuesta alguna, debido a las influencias que ejerce el grupo pedófilo, del que supuestamente forma parte su exmarido. 

Además de sus raíces extranjera, es decir como no es alemana, es considerada como una mentirosa en dicho país. 

Señaló que su caso, al igual que muchos otros, guarda relación al de Juliette, niña de siete años, que desapareció en extrañas circunstancias bajo el cuidado de su madre y su padrastro, el alemán Reiner Oberüber, imputado también por pornografía infantil, en nuestro país.

Dijo que el Consulado en Alemania, tanto el de Fráncfort como el de Berlín están al tanto de su caso, también la Embajada de Alemania en Paraguay maneja su situación, pero hasta ahora no obtuvo respuesta a su pedido de ayuda.

Resaltó que ya pudo contactar con otras madres de diversas nacionalidades que también atravesaron por su misma situación.

“Yo fui a todas partes (…) pero nadie me quería escuchar”, refirió.

La mujer finalmente lamentó que el 31 de julio de este años sus hijos, de acuerdo al estatuto del menor, irán “a vivir a la casa de quien los violó”, su padre biológico.

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