Varios guardias penitenciarios fueron tomados de rehén durante el amotinamiento de presos en Tacumbú. Uno de ellos, Néstor Pereira, habló con ABC TV y relató los momentos de desesperación que les tocó vivir durante más de tres horas.
Relató que si bien fueron llevados a una celda y amenazados de muerte, los internos los cuidaron, dándoles agua y hielo en todo momento.
“Nos agarraron dentro del pabellón, nos llevaron en una celda, nos metieron en una celda, nos protegieron, pusieron un candado y nos dijeron que ‘van a morir todos acá’ una presión de que si entraba la policía ‘van a morir todos acá, sino entra la policía, tengan por seguro que nosotros les vamos a cuidar’, por todos los momento nos cuidó bien, nos pasaron hielo, agua, nos tuvieron casi tres horas y media ahí (sic)”, relató el guardia.
Explicó que fueron momentos de mucha presión y desesperación, porque sus familiares estaban en las afueras del penal preguntando por ellos, y cuando llegó la ministra, algunos fueron soltados, entre ellos él, quien habló con la prensa para que sus demás compañeros sean liberados.
“Nosotros no vimos nada, estábamos en un lugar oculto ahí, solo los que nos estaban custodiando adelante”, expresó.
Por otra parte, cuando fue consultado sobre el motivo del amotinamiento, el personal de seguridad respondió que fue por los traslados masivos que estaban anunciando, ya que no se querían ir de Tacumbú.
“Nos dijeron que fue por el traslado masivo que iba a haber, porque ellos no quieren irse de acá por eso es”, mencionó.
Así mismo, detalló que el clan Rotela “maneja” todo el lugar y que si bien solicitaron que Javier Rotela sea trasladado, eso no va a pasar porque el hombre “maneja Tacumbú”.
“No se le iba a trasladar a Javier Rotela si es él el que maneja todo acá y todo era tranquilo, por ahí hay una cabeza vamos a decirle para que él se vaya de acá, pero él siempre manejaba acá, siempre Tacumbú”, expresó.
Por último solicitó un cambio de autoridades en el lugar, ya que necesitan personas competentes en el cargo, pues se trata de un lugar peligroso con personas con altas condenas.
“Tiene que ser un cambio que sepa dominar estas instituciones, acá nosotros no manejamos a nenes de jardín, acá hay muchos delincuentes de condenas pesadas de más de 40 años, tenemos internos muy peligrosos que cuidamos las 24 horas”, aseveró el guardia penitenciario.
