La Secretaría Nacional Antidrogas (Senad) ha puesto en marcha el plan piloto “Restaurar”, una iniciativa pionera que busca cultivar especies nativas de plantas en las zonas boscosas que fueron devastadas por estructuras criminales dedicadas al tráfico de marihuana. Este proyecto marca un hito en la lucha contra el narcotráfico, al incorporar componentes de cuidado y preservación del medio ambiente en la labor de la Senad.
El plan piloto dio inicio en una parcela ubicada en el Departamento de Amambay, donde agentes de la Senad se encargaron de la siembra de especies nativas proporcionadas por el Instituto Forestal Nacional. Esta acción busca restaurar los ecosistemas afectados por la deforestación llevada a cabo por los narcotraficantes para establecer cultivos ilícitos.
Lea más: Deforestación en la Región Oriental: 20% se destina a cultivos de marihuana
El ministro Antidrogas, Jalil Rachid, explicó que la idea de “Restaurar” surgió tras el Operativo Nueva Alianza realizado hace dos semanas, cuando los funcionarios constataron la existencia de grandes extensiones de tierras boscosas desmontadas para el cultivo de marihuana. “Para nosotros es importante porque no solamente implica la lucha contra el narcotráfico sino también un poco de conciencia con relación a la defensa y protección del medioambiente”, manifestó Rachid.
Al restaurar los bosques afectados por la actividad delictiva, se busca recuperar la biodiversidad y los servicios ecosistémicos que estos espacios brindan a la sociedad.
El Operativo Nueva Alianza, en su edición N° 42, se realizó recientemente en el marco de un convenio de cooperación entre la Senad y la Policía Federal del Brasil. Durante una sola jornada, se logró destruir 84 toneladas de marihuana que estaban destinadas a ser vendidas en el país vecino, lo que evidencia la magnitud del problema del narcotráfico en la región.
Lea también: Operativo antidrogas exitoso en Reserva del Mbaracayú
La implementación del plan “Restaurar” representa un paso significativo en la lucha integral contra el narcotráfico, al abordar no solo la persecución de los delitos, sino también la reparación de los daños ambientales causados por estas actividades ilícitas. Se espera que esta iniciativa siente un precedente y se replique en otras áreas afectadas por el narcotráfico, contribuyendo así a la recuperación de los bosques y la preservación de la riqueza natural de Paraguay.
Fuente: Última Hora.
