En un acto de defensa de la memoria histórica, víctimas de la dictadura de Alfredo Stroessner cuestionaron enérgicamente que un grupo pro-Israel pretenda utilizar la Plaza de los Desaparecidos de Asunción para sus movilizaciones. Alegan que ese lugar emblemático pertenece a los detenidos, perseguidos y asesinados durante el régimen dictatorial, y no debe ser utilizado para causas ajenas.
Un grupo de personas afines a la causa israelí ya realizó un par de movilizaciones en memoria de las víctimas del Holocausto perpetrado por la Alemania nazi durante la Segunda Guerra Mundial. Estos actos, que se desarrollaron por el microcentro de Asunción, culminaban en la icónica Plaza de los Desaparecidos, lo que generó malestar en los activistas y familiares de las víctimas de la dictadura stronista.
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Durante el miércoles, estas víctimas se congregaron en el mismo sitio para expresar su inconformidad. Rogelio Goiburú, director de Memoria Histórica del Ministerio de Justicia, aseguró que no se oponen a las movilizaciones pro-Israel en sí, pero sostuvieron que la Plaza de los Desaparecidos es un sitio de memoria dedicado exclusivamente a quienes fueron perseguidos por el dictador Stroessner.
Goiburú explicó que tomaron consciencia de la situación luego de que quisieron realizar un acto conmemorativo el pasado 4 de mayo, en recuerdo del Golpe de Estado de 1954 que llevó a Stroessner al poder, pero no pudieron hacerlo debido a que la organización pro-Israel ya había solicitado el permiso para utilizar el espacio ese día.
Ante esta situación, víctimas, familiares y activistas sociales se vieron en la necesidad de unir esfuerzos “para verdaderamente hacer saber y para que la ciudadanía sepa” los argumentos detrás del nombre “Plaza de los Desaparecidos” y a quiénes rinde homenaje. Goiburú enfatizó que la plaza no conmemora desaparecidos de otras guerras o conflictos, sino que “se constituyó en un homenaje, necesario, simbólico a tantos compatriotas detenidos y desaparecidos” durante la dictadura stronista.
Asimismo, el activista recordó que los delitos de lesa humanidad cometidos durante el régimen dictatorial no prescriben. Adelantó que intentarán dialogar con concejales de Asunción para especificar en el nombre que el espacio está dedicado exclusivamente a las víctimas de la dictadura de Stroessner.
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Tanto para Goiburú como para otros defensores de derechos humanos, las movilizaciones pro-Israel pueden llevarse a cabo en otros espacios públicos, sin necesidad de utilizar un lugar cargado de un simbolismo tan profundo para las víctimas del régimen dictatorial.
Fuente: Última Hora.
