El programa Hambre Cero, promovido por el gobierno de Santiago Peña con el objetivo de universalizar la alimentación escolar, dejó fuera a cientos de niños de escuelas inclusivas. Centros educativos especiales y de apoyo a la inclusión educativa han quedado sin el servicio de almuerzo escolar, afectando a estudiantes que anteriormente recibían este beneficio a través del Ministerio de Educación y Ciencias (MEC) o de las gobernaciones departamentales.
La situación se evidenció desde el inicio del año escolar, cuando diversas instituciones reportaron que sus alumnos no estaban contemplados en la nueva distribución de alimentos. En la Escuela Especial N° 17 Despertar, de Ayolas, y en la escuela especial Héctor Duarte, de Misiones, más de 160 niños fueron excluidos del programa. Casos similares se registraron en otras regiones del país, como Caazapá, Caaguazú y Asunción, donde centros de educación especial denunciaron la falta de provisión alimentaria.
En la capital, el Centro de Apoyo a la Inclusión Educativa N° 1 “Máximo Arellano” también quedó fuera del plan. Más de 60 alumnos no reciben almuerzo ni merienda escolar debido a que, según el MEC, forman parte de una oferta educativa “no formal”. Esta distinción ha generado incertidumbre entre los docentes y familias, quienes argumentan que todos los estudiantes deben tener acceso a la alimentación escolar, independientemente de su modalidad de enseñanza.
Ante la presión de la comunidad educativa, el MEC solicitó al Consejo Nacional de Alimentación Escolar (CONAE) la inclusión de los centros de apoyo en Hambre Cero. Sin embargo, hasta el momento, las instituciones afectadas no han recibido confirmación sobre su reincorporación. Mientras tanto, docentes y directivos han recurrido a gestiones alternativas para asegurar la alimentación de los alumnos, mientras continúan las gestiones con el Ministerio de Desarrollo Social (MDS).
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Otro problema emergente es la falta de infraestructura adecuada para el programa. En la escuela Juan Manuel Frutos de Barrio Obrero, Asunción, los alumnos almuerzan en corredores y aulas debido a la carencia de comedores. La directora del centro, Genny Rojas, explicó que deben adaptar las salas de clase para el almuerzo, afectando la dinámica escolar y aumentando las dificultades logísticas en la institución.
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El gobierno de Santiago Peña ha destinado USD 370 millones al programa Hambre Cero en 2025. Sin embargo, la exclusión de niños de escuelas inclusivas y la falta de infraestructura han generado críticas y llamados urgentes para ajustar la política de alimentación escolar y garantizar que todos los estudiantes, sin distinción, reciban este derecho fundamental.
Fuente: ABC Color
