La audiencia preliminar que debía realizarse este viernes para saber si el caso era elevado a juicio oral fue suspendida debido a la recusación de la magistrada.
Caballero más tarde se inhibió de entender en la causa argumentando haber recibido un mensaje de texto amedrentador.
De acuerdo a lo informado por el equipo de comunicación que trabaja con la querella, el mensaje de WhatsApp le fue enviado el día el jueves, 13 de setiembre, a través de un número telefónico desde el exterior (+1(414) 731-2501), de una persona a que dijo ser Peter Tase.
En su escrito de inhibición, la jueza Caballero expresa que el tal Tase “escribió pidiendo en forma expresa sobre la presente causa, en relación directa al imputado Luis Emilio Saguier Blando, inhibome de seguir entendiendo en la presente causa de conformidad a lo dispuesto en el art. 50 inc. 13 del C.P.P. (cualquier otra causa, fundada en motivos graves que afecten su imparcialidad o independencia).”
Relata la jueza Caballero: “que el mensaje recibido a mi teléfono particular, donde dice “Le escribo sobre el caso del SR. Luis Emilio Saguier Blanco. Le pido que se haga justicia conforme las leyes y constitución nacional del Paraguay. Le pido muy respetuosamente de que se haga justicia de acuerdo al dictamen de la Fiscalía Regional de delitos económicos Unidad Nr. 14 que lo sobreseyo (sic) a Don Luis Emilio Saguier Blanco. Ruego a usted de respetar las leyes vigentes y respetar vuestra integridad profesional”.
Sigue diciendo la señora Jueza que “quien dijo ser Peter Tase, afectó mi imparcialidad y objetividad en atención a que mediante el buscador Google, hallé información que vinculada a dicho nombre, con el Dr. Jorge Saguier Guanes, abogado del imputado citado, noticia publicada en el diario Abc en fecha 10/09/2018, donde refiere que el citado es Asesor especial de asuntos latinoamericanos de Kosovo, siendo su asesor el Dr. Jorge Saguier”.
En el informe remitido a este medio también se relatan otros antecedentes mencionados por la magistrada en su inhibición.
Antecedentes
Luis Saguier Blanco está imputado, junto a Gabriel Mersán, Néstor Añazco y otros, en cuatro causas, que van desde estafa a lavado de dinero, más producción mediata de documentos públicos de contenido falso, tras la venta de la empresa Electrofácil, comprada por el Grupo Unicomer, multinacional salvadoreña, que al tomar posesión real del negocio, detectó una cartera ficticia gigantesca con la que se reflejaban falsas ganancias y una condición económica diferente.
Según la denuncia, la operación fue por más de USD 30 millones. Pero solo las operaciones ficticias para aumentar el valor de la empresa, sumaban USD 24.500.000, producto de unos 45 mil pagarés falsificados.
