En conferencia de prensa, el fiscal Andrés Arriola contó cómo asesinaron al dueño de la estancia, a su esposa y sus dos nietos.
Reveló que el propietario de la estancia Taguató, fue el primer asesinado, prácticamente ejecutado, con el arma de fuego, una escopeta calibre 12, recibiendo un tiro certero con varios perdigones justo en el corazón.
La esposa del dueño, Francisca Nidia Núñez, fue la segunda persona baleada, con la misma arma que su marido.
Posteriormente, uno de los hermanos Vera, junto con otro individuo, persiguieron a los niños. Primero mataron a la nena dándole más de un tiro conforme a los informes forenses, pues su cuerpo presentó refilones cerca de la cabeza.
Luego, lograron alcanzarla y le aplicaron un tiro certero en la espalda. El proyectil alcanzó el corazón de la pequeña.
Posteriormente se encargaron del niño, quien al ver lo que estaba pasando corrió hacia el monte, y con un único tiro en la parte de la nuca, también terminaron con su vida.
“Esta gente dio muerte a todas estas personas el día martes de tarde noche. Desde el martes trabajaron hasta el viernes, entre arreo y remarcación de los animales y llevados en tres trasganados”, indicó el agente en conferencia de prensa.
