Un importante grupo de agentes policiales y fiscales llegó hasta la penitenciaría nacional de Tacumbú para llevar a cabo un allanamiento en algunas celdas.
Sin embargo la misión fue abortada, debido a que los reclusos, incluyendo miembros del Primer Comando Capital (PCC) se amotinaron y evitaron el paso de los intervinientes, cerrando con llave sus pabellones.
El procedimiento se llevó a cabo en torno a una investigación sobre llamados extorsivos realizados desde la cárcel, conocidos como sexting. Varias personas de un importante caudal económico realizaron sus denuncias, según informó ABC Color.
El procedimiento duró casi media hora y fue interrumpido para evitar cualquier tipo de incidentes violentos, según indicaron fuentes cercanas a la intervención.
El fiscal Joel Cazal comentó que se logró entrar a un pabellón al inicio del operativo, lo que causó que los demás reclusos se alertaran mutuamente e inicien el amotinamiento.
Sexting desde la cárcel
El caso está liderado por la Fiscalía de Luque y cuenta con siete denuncias de víctimas con mucho caudal económico, pero se presume que hay muchas más que no quisieron reportar el hecho por temor a quedar expuestos. Los fiscales Javier y Néstor Cañete también acompañan las indagaciones.
En esta modalidad de extorsión, los delincuentes creaban perfiles falsos de jovencitas en redes sociales y así eran captadas las potenciales víctimas.
Una vez estrechada la confianza en el relacionamiento, mediante la web, las supuestas señoritas les pedían intercambiar fotos íntimas y luego de que daba el intercambio, los varones eran extorsionados para que las fotos no sean difundidas en las redes.
Otro allanamiento en barrio modelo
Por otro lado, se realizó otra intervención en el barrio modelo de San Francisco, donde fueron detenidas varias personas, entre ellas una mujer, quien se encargaba de solicitar y cobrar los giros. El caso involucra a unas 20 personas más y los extorsionadores ya cobraron más de G. 50 millones a sus víctimas.
