El Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias y del Ambiente (Ineram) “Prof. Dr. Juan Max Boettner” ha suspendido la realización de estudios tomográficos durante más de una semana debido a un desperfecto técnico en su equipo principal, situación que ha afectado a cientos de pacientes que requerían este servicio diagnóstico esencial para patologías respiratorias.
Víctor Godoy, director médico de la institución, confirmó la situación y explicó que el problema fue identificado por técnicos del Ministerio de Salud, quienes determinaron que la falla se debía a un componente dañado que requería ser reemplazado. “El aparato fue revisado por técnicos del Ministerio de Salud y se identificó un repuesto dañado. Ya fue solicitado del extranjero y llegó ayer a Aduanas”, detalló a ABC.
Las autoridades sanitarias mantienen expectativas de que el servicio pueda restablecerse en las próximas horas, ya que el repuesto necesario para la reparación se encuentra actualmente en trámites de liberación aduanera. Godoy expresó su confianza en que los técnicos ministeriales puedan retirar la pieza hoy mismo para proceder inmediatamente con la instalación y las pruebas correspondientes.
Si el proceso de reparación transcurre según lo previsto, el tomógrafo podría volver a funcionar en un plazo muy breve. “Probablemente, esta tarde ya se hagan pruebas con pacientes. Si todo sale bien, volveríamos a la normalidad desde esta noche”, manifestó el director, quien subrayó la urgencia de restablecer este servicio crucial para el diagnóstico de enfermedades respiratorias.
La situación se torna más compleja al considerar que el Ineram cuenta con un segundo tomógrafo que también se encuentra fuera de servicio. Este equipo, de mayor antigüedad, presenta un desperfecto más grave y, aunque también está en proceso de reparación, no existe una fecha estimada para su puesta en funcionamiento, lo que ha dejado al instituto completamente desprovisto de capacidad para realizar estudios tomográficos.
El impacto de esta suspensión temporal ha sido significativo, considerando que el Ineram realiza entre 1.600 y 1.800 tomografías mensuales. Esto significa que aproximadamente 400 pacientes semanales han visto postergados sus estudios diagnósticos, lo que podría repercutir en la evolución de sus patologías y en el inicio oportuno de tratamientos específicos.
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Para mitigar el impacto en los casos más urgentes, la institución activó mecanismos de coordinación interinstitucional. “Trabajamos de manera coordinada con el Hospital del Trauma. Los casos urgentes fueron derivados y atendidos allá sin afectar la calidad del servicio”, explicó Godoy, evidenciando las estrategias de contingencia implementadas para garantizar la continuidad de la atención en situaciones críticas.
Los pacientes cuyos estudios estaban programados durante este período han sido notificados del reagendamiento de sus citas. Sin embargo, este contratiempo técnico pone de manifiesto la vulnerabilidad del sistema de salud pública ante la falta de equipos de respaldo y protocolos de mantenimiento preventivo que eviten la interrupción prolongada de servicios diagnósticos esenciales para la población paraguaya.
Fuente: ABC Color
