El Consejo de Defensa Nacional (Codena) anunció el refuerzo de los controles migratorios y de tránsito en los pasos fronterizos con Brasil. Esta decisión responde a una alerta emitida desde el Comando Tripartito sobre el posible ingreso al territorio nacional de miembros de la fracción criminal Comando Vermelho. La situación se generó tras un reciente y masivo operativo policial en Río de Janeiro.
El operativo en Río de Janeiro, catalogado como el más letal en la historia de la ciudad brasileña, se cobró la vida de unas 132 personas, aunque el Gobierno regional solo confirmó 119 víctimas. El procedimiento derivó en enfrentamientos armados y en la presunta fuga de criminales con orden de captura, quienes podrían buscar refugio en países limítrofes, como Paraguay.
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Ante esta potencial amenaza, el Codena, a través de un comunicado emitido por el contra almirante Cibar Benítez, ministro secretario, dispuso la adopción de medidas extraordinarias de prevención y vigilancia desde las primeras horas de este jueves. Estas acciones se concentran en toda la franja fronteriza del este del país y buscan el cumplimiento estricto de las normas legales vigentes.
Las autoridades dispusieron el incremento del patrullaje y monitoreo en las áreas fronterizas para prevenir cualquier ingreso irregular. A su vez, se intensificaron y coordinaron las operaciones de inteligencia y vigilancia estratégica. El objetivo es garantizar una respuesta de seguridad integral y eficaz ante cualquier eventualidad.
El plan de seguridad también contempla una comunicación permanente y acciones nacionales conjuntas con las autoridades de la República Argentina y de la República Federativa del Brasil. De hecho, la ministra de Seguridad Nacional argentina, Patricia Bullrich, activó una “alerta máxima” en las fronteras de su país con Brasil, siguiendo la misma preocupación por el movimiento de los criminales.
La operación brasileña se centró en complejos de favelas, como los de Penha y Alemão, resultando en el arresto de 113 sospechosos y el decomiso de 119 armas y catorce artefactos explosivos. Los miembros de la banda criminal respondieron con bloqueos en vías de la zona norte de Río, causando interrupciones en el transporte y el cierre temporal de escuelas y centros de salud.
Fuente: ÚH
